Hacía tiempo que no lo preparaba, así que el otro día pensé que debía publicarlo. Parece complicado y no lo es para nada.
Hay gente que le cuesta preparar bechamel. El truco es removerla con unas varillas y así nunca tendréis problema.
Ingredientes:
-1/2 kilo de berenjenas.
-1/2 kilo de carne picada.
-Un chorro de vino.
-Salsa de tomate. (Yo la hice casera).
-Queso rallado.
-1/2 litro de leche.
-Harina.
-Mantequilla.
-Nuez moscada.
-Aceite de oliva virgen.
-Sal.
Lavamos las berenjenas y sin pelarlas las partimos en rodajas de 1/2 centímetro más o menos. Las freímos en aceite de oliva y reservamos.
Para hacer salsa de tomate con la carne, pochamos 1 cebolla y un diente de ajo picados en aceite, añadimos la carne y dejamos hacer; salpimentamos. Echamos un chorro de vino, dejamos que evapore y le ponemos 1 kilo de tomates sin piel ni semillas y una cucharadita de azúcar para restar la acidez del tomate. Dejamos hacer todo junto unos 20 minutos ó 1/2 hora. Reservamos.
Ahora la bechamel: En un cazo ponemos una cucharada colmada de mantequilla, lo ponemos al fuego y cuando esté líquida le ponemos 2 cucharadas de harina. Removemos con las varillas un par de minutos para que se haga la harina. Vamos vertiendo leche, poco a poco y removiendo sin parar con las varillas. Le ponemos un poco de nuez moscada molida y sal al gusto.
En una fuente o molde apto para horno, vamos poniendo capas. Primero echamos un poquito de bechamel, encima una capa de berenjenas, luego una capa de la carne en salsa, otro poco de bechamel y otra de berenjena, carne , bechamel. Acabamos con una capa de berenjena, vertemos toda la bechamel por encima, le ponemos bien de queso rallado y lo metemos a gratinar en el horno, en la parte de arriba y a tope de calor. Sacamos del horno y listo!
*Yo cuando le puse el queso rallado, partí la mitad de la lasaña y la congelé. Así cuando quiera comerla sólo es dejarla descongelar y al horno a calentar y a gratinar. Queda perfecta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario